Decepcionado por mi culpa

Acabo de pensar "tengo un blog, ¿porque no usarlo?" Y eso estoy haciendo, usarlo. Lo único que me preocupaba antes sobre mi blog eran los comentarios que recibían las entradas, ya como que me da igual si una entrada recibe mas comentarios o menos la verdad, porque el objetivo de un blog personal es poder desahogarse sobre lo que le pasa y me he dado cuenta de que al principio, cuando me cree el blog escribía lo que quisiese sin importarme nada, porque nadie sabía quien era, ni me conocía. Con el tiempo fui teniendo seguidores y ya me preocupaba más por publicar algo que le gustase para no perderlos o conseguir mas. También por calcular los días en los que publicaba y en mirar lo que escribía en cada una, parecía una calculadora y he seguido así hasta ahora. Hasta decir "Basta" y pensar un poquito mas en mi y pasar un poco de los demás.

Ayer me examine del práctico de conducir y estaba aprobada hasta llegar al último minuto del examen que la cagué en un ceda el paso. Es la segunda vez que me examino y yo tenía la esperanza de aprobar, de echo esa es la rabia que tengo encima desde ayer Jueves por la mañana. ¿Porque no esperé un poco mas a que pasaran esos dos coches que venían a toda leche, pasar yo y finalmente aprobar? No, ya había quitado el pie del freno y me dije "bah, me da tiempo de pasar" pero no, en ese momento escuché el "Pipí" del chivato de mi profesor, lo que quería decir que el tubo que pisar el freno para no estamparnos contra los coches que venían y por lo cual el examinador que estaba sentado detrás mío, suspenderme.

Pare a un lado y la segunda chica que se examinaba después de mi se cambió y yo me senté detrás. Empecé a llorar como hacía un montón de tiempo que no lloraba así, la verdad es que lo pienso ahora y pienso que parecía una cría de 14 años, pero no me arrepiento porque es lo que sentía en ese momento, es más, cada vez que recuerdo lo estúpida que fui al no frenar y esperar a que pasaran los coches rompo a llorar.

Era la segunda vez que podía presentarme sin deberle nada a tráfico, solo las practicas a mi profesor de la autoescuela, pero para presentarme de nuevo dentro de dos semanas porque es la segunda vez que suspendo, tengo que pagarle 90 euros a Tráfico y volver a hacer practica, porque estar dos semanas sin coger el coche, pues seguro que me pasa factura. Por lo tanto todo eso conlleva dinero y mis padres no son millonarios ni mucho menos y el dinero no nace de los árboles (ya estaría bueno). Mi madre es mas sensata y mas comprensiva, pero cuando me llamo mi padre para preguntarme como me había ido, pues se puso echo una furia, super cabreado y mosqueado. Hacía tiempo que no lo había visto así la verdad.

Cuando llegue a casa él estaba en su cuarto viendo una película y en toda la tarde no salió de su habitación, parecía que yo era la única que estaba en mi casa. Hoy casi que no me dirige la palabra y ahora mismo se encuentra en su cuarto de nuevo y ayer me dio la sensación de que estaba llorando, pero no estoy segura.

Tengo la sensación de que decepcione a mi padre y yo llevo mal, deprimida y  llorando cada cierto tiempo. Se que ahora es otro derroche de dinero para una tercera vez, lo se, soy consiente de eso, pero... joder, me come la culpa y la rabia por dentro.

Me sorprendió que una amiga que conocí por un grupo de Lovatics me notó deprimida y eso que ni me conoce en persona. Eso me da pensar que si lo ha notado ella tan solo por escrito, las persona que me ven día a día y me conocen lo deberán de notar a distancia. Mi abuela por ejemplo me lo notó y me preguntó, pero le mentí diciéndole que no me pasaba nada, aunque sé que ella no es tonta.

¿Tú crees que yo puedo aguantar dos semanas a esperar a examinarme de nuevo con esta angustia y esta presión encima? No tengo ganas de nada y de milagro me dio por cambiarle el look a mi blog hoy, para distraerme un rato sería. Solo espero que se cumpla ese dicho de "A la tercera va la vencida" y que el día 21 apruebe y me saque el carnet de conducir de una vez.

Lo que daría yo ahora por estar al lado del mar escuchando como rompen las olas y olividarme de todos los problemas por un momento.